LOS FABRICANTES DE AUTOMOVILES PIDEN A LA ADMINISTRACION QUE INCENTIVE ECONOMICAMENTE LA RETIRADA DE VEHICULOS VIEJOS

MADRID
SERVIMEDIA

Los fabricantes de automóviles pedirán a la Administración que incentive cn 160.000 pesetas a las personas que decidan retirar sus coches con más de diez años de antigüedad para la adquisición de uno nuevo, según anunció hoy en rueda de prensa Juan Llorens Carrió, presidente de la Confederación Española de Automoción (CEA).

Llorens presentó el proyecto "Renpark", que ha sido desarrollado por su Confederación y por la Asociación Española de la Carretera y financiado por la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles, Camiones y Tractores (Anfac) y por la Asociación Naconal de Importadores de Automóviles, Camiones, Autobuses y Motocicletas (Aniacam).

El responsable de CEA explicó que el objetivo de este programa, que ya ha sido entregado a la Administración, es tener un parque de vehículos con una edad media equiparable a la de la CE, para lo que proponen la retirada de los vehículos con más de 10 años de antigüedad, que representan la tercera parte del total del parque, que a finales de 1990 se situaba en 11.995.640 unidades.

Según Llorens, para conseguir que n España el perfil del parque de automóviles de menos de 10 años sea como el de los países más avanzados de la CE, "habría que tirar por la borda dos millones de coches viejos", lo que permitiría aumentar la seguridad vial y reducir el número de accidentes.

Para fomentar la retirada de estos vehículos de más de diez años, los promotores del proyecto proponen que la Administración realice un descuento de 160.000 pesetas al usuario sobre los impuestos que paga por la adquisición del coche nuevo.

Enel caso de las furgonetas y camiones pesados, el incentivo sería de 220.000 pesetas, de entre 250.000 y 400.000 pesetas para los camiones pesados y de 400.000 pesetas para los autobuses y autocares. Para los vehículos industriales el incentivo se realizaría a través de una línea de crédito especial para la compra del nuevo vehículo.

Según Llorens, esto no supondría un coste demasiado elevado para la Administración. Como ejemplo citó el caso de un usuario que quiera comprarse un vehículo de tipo medio de alrededor de 1.200.000 pesetas), por el que la Hacienda pública ingresa en concepto de IVA, matriculación, impuestos de circulación y otras tasas un total de 435.000 pesetas.

Explicó que si a estas se restan las 160.000 pesetas de incentivo seguiría ingresando 275.000 pesetas. "No es un mal negocio que por cada cien pesetas incentivadas Hacienda obtenga un beneficio neto de 172 pesetas", afirmó. Llorens no descartó la posibilidad de negociar otras mejoras en materia de financiación para los compradres de vehículos.

REDUCIR LA SINIESTRALIDAD

Llorens resaltó el ahorro económico que supondría la renovación del parque de vehículos antiguos, que cifró en un total 756.500 millones por cada millón de turismos de más de diez años que se renueve y 271.000 millones por cada cien mil de vehículos industriales.

En el caso de los turismos, de los 756.000 millones de pesetas 420.000 corresponderían a ingresos de Hacienda por impuestos en el nuevo vehículo, 160.000 millones a ahorro energético, 84.000 n daños evitados al medio ambiente, 70.000 en costes de mantenimiento de los vehículos y 22.500 millones en siniestralidad.

El presidente de CEA aseguró que la renovación del parque de vehículos de más de diez años permitiría reducir la siniestralidad un 2,8 por ciento, lo que supondría un ahorro de 3.220 pesetas por año por vehículo renovado. En combustible, el ahorro oscilaría entre 220 y 230 litros de combustible al año por vehículo.

Además, los promotores del proyecto "Renpark" proponen que s ponga fin a los cementerios de coches y que sea la inspección técnica de vehículos la que se encargue de convertirlos en chapa prensada, con el fin de evitar "el gitaneo con las piezas de los coches viejos o que han sufrido accidentes, lo que entraña un elevado riesgo al ponerlas en otros vehículos".

Llorens explicó que el proyecto ha sido entregado ya en mano a los ministerios de Hacienda y de Industria, a la Dirección General de Tráfico y a otras instancias relacionadas con el mundo del automóvil, ara abrir un debate y negociarlo.

"La insaciable avidez por la recaudación choca con el proyecto, por lo que es probable que tenga el rechazo de Hacienda, pero creo que hay gente en el ministerio lo suficientemente inteligente como para entender que es necesario", añadió, al tiempo que dijo que sí espera, sin embargo, contar con el apoyo de Industria y de Tráfico.

(SERVIMEDIA)
29 Nov 1991
NLV