La última tirada de pesetas se compone únicamente de monedas de 100 y una emisión especial de piezas de plata con un valor de 2.000 pesetas. En ambos casos, portan en el reverso la imagen que mostraba la primera peseta que se emitió e España en 1869, denominada la Hispania, consistente en una matrona recostada sobre los Pirineos, que porta una rama de olivo en la mano.

Para el ministro de Economía, Rodrigo Rato, esta emisión es un "momento especial" puesto que supone la desaparición de la peseta y por ello se ha decidido lanzar estas dos monedas.

"Estamos en un día simbólico e importante porque se da un paso más en cerrar una etapa importante, la peseta, para avanzar hacia la etapa nueva y probablemente más importante de la cnstrucción europea, en la que España está participando activamente", concluyó Rato.

La tirada de monedas de 100 pesetas será de 140 millones de unidades, mientras que en el caso de las monedas de 2.000 sólo se realizarán sobre pedido.