Blanco, que es también presidenta de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), señaló que mpliar el derecho de huelga y sindicación de los extranjeros no es un mérito del Gobierno, ya que son "derechos fundamentales y gratuitos. Sólo faltaba que el Gobierno no diera marcha atrás después de las críticas que le han llovido de todas partes".

La portavoz socialista considera positivo que elEjecutivo endurezca las penas para los empresarios que contraten a inmigrantes sin papeles, pero advirtió de que esta medida no mejora la globalidad del anteproyecto de ley, "donde queda intacta la no asstencia letrada en trámite de urgencia para las expulsiones".

Delia Blanco señaló que elPP quiere "vender" su esfuerzo en la lucha contra las mafias que trafican con inmigrantes, pero recordó que en la actual ley vigente ya están recogidos todos los instrumentos para luchar contra este tipo de actividad delictiva. "Un inmigrante sin papeles puede denunciar a la mafia, convertirse en un testigo protegido y acceder al proceso de regularización", explicó.

"Todo lo que sea no limitar los derechs y las libertades de los extranjeros en España es un avance". No obstante, agregó, hay que esperar a conocer cuáles son realmente esas modificaciones del anteproyecto de reforma de la ley que mañana aprobará el Consejo de Ministros.