Según informaron fuentes de FEPEX a Servimedia, esa acción supone un cambio de estrategia de la patronal, ya que la policía francesa "sigue haciendo caso omiso a los ataques contra los camiones españoles", después de varias peticiones a las autoridades galas para que se apliquela normativa de libre circulación de mercancías.

La gota que ha colmado el vaso fue la destrucción el pasado martes por parte de agricultores franceses, pertenecientes a la Coordinadora Rural, de la carga de fresas onubenses del camión de la empresa Mora Hermanos, ante la pasividad de la policía gala.

FEPEX ha encargado a un bufete de abogados francés que inicie las acciones penales oportunas contra esa organización agraria, que desde hace meses viene amenazando a sus propios compatriotas, importdores y comerciantes de frutas españolas, con destruir toda la producción que pongan a la venta.

"Otra cosa que podríamos hacer es lo mismo que ellos, destruir los productos franceses que entren, pero creemos que esto traería una espiral de violencia que no sería beneficiosa para nadie", afirmaron las fuentes de FEPEX consultadas por esta agencia.

La Coordinadora Rural es una organización de agricultores de carácter radical creada recientemente, ubicada en el sur y el este del país vecino. El proio COPA (Comité de Organizaciones Agrarias de la CE) ha condenado su forma de actuación, ante las denuncias españolas.

El pasado 21 de mayo, un millar de agricultores, convocados por FEPEX y las organizaciones agrarias ASAJA, UPA, y COAG, se manifestaron frente a la Embajada francesa en Madrid y en varios hipermercados de capital francés en varias provincias españolas, para exigir al Gobierno galo que impida las acciones violentas de la Coordinadora Rural.

El propio ministro de Agricultura, PedroSolbes, manifestó en el pasado Consejo de Ministros comunitario que la actitud francesa es "inadmisible", ya que el Gobierno galo además está pidiendo en frontera un documento de tránsito (T-2) a los camiones españoles que ha sido suprimido por la CE en 1993, según la interpretación española.

Sin embargo, la comisaria de Aduanas de la Comisión Europea, la francesa Christiane Scrivener, ha respondido de forma contradictoria a Francia y España sobre la necesidad del T-2, lo que fuentes de Agricultura inerpretan como que Francia está presionando a la CE para que reconozca la validez de ese documento.