LOS EXPORTADORES ESPAÑOLES A MEJICO SUFREN RETRASOS PARA COBRAR SUS MERCANCIAS, COMO CONSECUENCIA DE LA CRISIS DE ESE PAIS
- Las inversiones españoles se han devaluado en torno a un 50 por ciento
- Sin embargo, los expertos recomiendan quedarse, ya que la situación mejorará en unos tres meses
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Las empresas españolas que exportan a Méjico están sufriendo retrasos en el cobro de mercancías y servicios, como consecuencia de la crisis financiera que está sufriendo el país americano, según confirmaron a Servimedia fuentes empresariales.
Este aumento de la morosidad con Méjico, país al que España exportó en 1993 casi 150.000 millones de pesetas, se ha producido por la depreciación de su moneda -el peso- y por el crecimiento de la deuda exterior en un 50 por ciento, lo que ha llevado a numerosos iversores extranjeros a abandonar el país.
Sin embargo, esta no es la única consecuencia negativa de la crisis por la que atraviesa Méjico, ya que los españoles que han apostado por este país han visto en menos de un mes cómo sus inversiones se devaluaban en torno a la mitad por la depreciación del peso.
La inversión de capitales españoles en Méjico se ha multiplicado por 10 desde 1991, cuando fue de 1.466 millones de pesetas, frente a los 14.848 millones de 1993, según datos oficiales de la Secrearía General de Comercio.
César Cantalapiedra, responsable de las inversiones mejicanas en la consultora Analistas Financieros Internacionales, recordó que el peso mejicano ha perdido un 46 por ciento de su valor en pesetas, mientras que la deuda en dólares cayó en torno a un 25 por ciento.
Cantalapiedra indicó a Servimedia que las inversiones en Bolsa también han sufrido retrocesos cuantificables en un 50 por ciento, atendiendo a su índice general, si bien parece que la situación se está calmand tras el apoyo decidido del presidente de EEUU, Bill Clinton, a la economía mejicana.
Por su parte, José María Lacasa, director de Relaciones Internacionales de CEOE, aseguró a esta agencia que en esta crisis los exportadores españoles también se verán perjudicados por la mayor competitividad que han adquirido las empresas mejicanas por la devaluación del peso, si bien no afectará a aquellas sociedades cuyos productos no tengan competencia directa de los empresarios locales.
El responsable de la atronal reconoció como "preocupante" lo ocurrido en el país americano, como consecuencia de la situación política, aunque dijo que la devaluación del peso era esperada por los inversores, ya que estaba en unos niveles ficticios.
BUEN FUTURO
A pesar de todo, Cantalapiedra y Lacasa coincidieron en que esta crisis va a posibilitar que a medio plazo Méjico sea un país interesante para invertir, por lo que recomendaron a las empresas españolas que no se hayan ido que mantengan sus inversiones, siempre y uando no necesiten retornos de capital a corto plazo.
Cantalapiedra cree que en un plazo de dos o tres meses se estabilizará la situación, el peso dejará de fluctuar y los tipos podrán empezar a bajar, una vez que el Estado haya satisfecho su necesidad de dinero externo para financiar el déficit corriente y financiero mejicano.
Lacasa, por su parte, destacó las buenas expectativas de inversión a partir de ahora, una vez que con la mitad de dinero se puede acceder a un país avalado por el acuerdo afta, lo que implica la posibilidad de acceder al mercado de Estados Unidos y Canadá.
(SERVIMEDIA)
14 Ene 1995
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