El director de este seminario, el profesor Antonio Gil Olcina, asegura que estos bombardeos ya se han practicado y que, "aunque no se puede hablar de que el éxito haya sido de un cien por cien, sí ha obtenido resultados positivos".

Este sistema pretende disminuir el número de precipitaciones en el Levante español, que se caracterizan, según il Olcina, "por lluvias escasas irregulares y de gran intensidad horaria, sin perder de vista las lluvias sólidas, que afectan a los cultivos mediterráneos". La causa de este tipo de precipitaciones es, según los expertos, el propio mar Mediterráneo.

Otra característica que define al Levante español, según Gil Olcina, es "el no aprovechamiento de las lluvias que caen y que lo hacen con gran intensidad".

Entre las medidas que se proponen para evitar las avenidas y las ramblas sin que el agua se fitre en la tierra es "volver a métodos tradicionales que fueron abandonados en los años 50, como las terrazas o las pequeñas presas".

Estos expertos aseguran que la sequía, las gotas frías y los fuertes vientos de poniente que afectan al Levante no se deben a un cambio climático, como se especula, sino que son rasgos característicos de la meteorología de esta parte del país.