El especialista galo Pierre Marie Lledo, del Instituto Pasteur, uno de los ponentes del coloquio, expuso sus investigaciones sobre la capacidad del cerebro humano de generar nuevas neuronas capaces de reestablecer conexiones nerviosas dañadas.

Lledo expuso los resultados de los experimentos con ratones y monos realizados por su equipo, utilizando estas neuronas "juveniles" en zonas dañadas de la médula espinal, para devolver la motricidad a extremidades paralizadas.

El experto subrayó que los animales así tratados experimentaron alguna mejoría, pero se produjeron algunos efectosadversos. Sin embargo, estas células crearon un entorno favorable a la recuperación de algunas neuronas existentes, un resultado inesperado que podría abrir nuevas vías de investigación.

Por su parte, el equipo de Geoffrey Raisman, del Instituto de Neurología del University College de Londres, tras haber realizado experimentos con animales ha realizado ensayos con pacientes que habían perdido la movilidad en una extremidad, como consecuencia de lesiones medulares.

Los voluntarios recibieron inyecciones de unas células del bulbo olfativo -región situada en la parte anterior del cerebro- que favorecen la formación de nuevas neuronas, y el resultado fue una ligera recuperación del movimiento en algún dedo de la mano o el pie.

"Las células madre han despertado el entusiasmo en el ámbito de la investigación, por su capacidad de transformarse en cualquier otra célula del organismo, sin embargo el camino para descubrir aplicaciones terapéuticas reales es largo", advirtió Nicole Le Douarin, miembro de la Academia Gala de Ciencias.

"Es preciso no despertar falsas esperanzas en el público con respecto a las posibilidades de la medicina regeneradora", subrayó Claude Huriet, presidente del Instituto Curie.