Los montañeros, que lograron instalar el campamento II a 7.800 metros de altura en la arista N-NE, abandonaron el pasado día 15 de este mes el camp base y ayer, martes, llegaron a Kathmandú (Nepal). Su regreso a España está previsto para dentro de unos días.

La expedición, compuesta por su jefe, Rogelio Muñoz, Antonio Marco, Pedro Holst, Joaquín Muñoz y Jesús Guinea, junto a personal nepalí y chino, instaló el campo base a 5.200 metros de altura el pasado 4 de septiembre.

El campamento fue avanzando en altura por el collado norte del Himalaya hasta ubicarlo a 7.800 metros en la arista N-NE, desde donde los montañeros colocaron cuerdas fijashasta los 8.300 metros, pero no pudieronn instalar allí un campamento III por los fuertes vientos huracanados que sacudían la vertiente.

La cadena de montañas del Himalaya es la mayor elevación del planeta y resultado de la colisión entre las placas de la India y Asia. El objetivo de la expedición es llevar a cabo estudios tectónicos en la vertiente norte del Everest. Las muestras recogidas serán estudiadas en el Museo de Ciencias Naturales del CSIC.