Bendala era compañero del comandante José Manuel Ripollés, fallecido en el accidente, y del que recibió cuatro días antes de la catástrofe un correo electrónico en el que le alertaba de las deficiencias de los aviones utilizados para desplazar a las tropas.

El ex militar hizo estas declaraciones ante el juez Grande-Marlaska en calidad de testigo en la investigación que el magistrado está llevando a cabo para esclarecer todo lo relativo a la contratación del Yak-42, que se estrelló en Trebisonda (Turquía) el 26 de mayo de 2003, provocando la muerte de 62 militares españoles que regresaban de Afganistán.

Bendala, en referencia a las declaraciones del ex ministro de Defensa Federico Trillo, aseguró que el dirigente popular "no es quien para decirle al fiscal lo que debe o no debe investigar".

El militar en excendencia estuvo declarando ante Grande- Marlaska cerca de 20 minutos y sólo recibió preguntas de los abogados de los familiares de las víctimas, quienes se interesaron por el contenido del correo electrónico que le envió su amigo Ripollés y sobre las circunstancias en las que lo recibió.

En dicho correo, Ripollés se quejaba de "la falta de seguridad y el estado de mantenimiento en los aviones", según explicó Bendala.

"Decía que eran aviones que se estaban alquilando a piratas aereos, personas que en condiciones límite transportaban material y personal de las fuerzas armadas", relató el comandante en excedencia.

Bendala puntualizó que Ripollés "había sido jefe de misión" por lo que estaba "suficientemente capacitado para saber en que condiciones se estaba volando".

Sobre las dudas que después del accidente surgieron sobre la autenticidad del correo electrónico de Ripollés, Bendala aseguró que este está "perfectamente identificado con la numeración de Defensa, la procedencia y el destinatario".

CUESTIONARIO PARA TRILLO

Hoy estaba previsto que declarase dentro de esta investigación el ex ministro de defensa José Bono, pero Grande-Marlaska, a instancias de la Fiscalía, dejó sin efecto la citación y la comparecencia del dirigente socialista no se producirá hasta que se reciba la declaración por escrito de su antecesor en el cargo, Federico Trillo.

Grande-Marlaska, atendiendo a la condición de aforados de los dos testigos, dio a Trillo y a Bono la opción de contestar por escrito a las preguntas del Ministerio Fiscal y de las partes pero el dirigente socialista decidió rechazar la oferta y desplazarse personalmente a la Audiencia Nacional para declarar ante el juez.

Fuentes de la Fiscalía señalaron que el cuestionario para Trillo está ya "casi acabado" y explicaron que lo único que falta es que el Ministerio Público incorpore sus preguntas y que Grande-Marlaska las revise para que se le envíe al ex ministro.

Por lo tanto, el juzgado de Grande-Marlaska enviará estas preguntas a Trillo "mañana o pasado" y, aunque no se le dará al dirigente popular un plazo para contestar, si que se le pedirá que responda "lo antes posible".

Las Fuentes consultadas explicaron que se decidió pedir el aplazamiento de la declaración de Bono por "pura lógica" ya que las preguntas que se le harán versarán sobre la actuación de Trillo tras el accidente y prefieren esperar a tener las respuestas del ex ministro popular para pedir la comparecencia del dirigente socialista.

Por otro lado, hoy también estaba previsto que declarase ante Grande-Marlaska Carol Norma, representante en España de la contratista Chapman Freeborn, la empresa que se encargó de subcontratar los aviones de la ex Unión Soviética para el Ministerio de Defensa, pero su comparecencia ha sido aplazada ya que Norma reside en el extranjero.