El proponente de IU, Pablo Castellano, argumentó que "el derecho a la vida es un derecho a la vida digna y no puede ser el castigo a una situación de sufrimiento".

Castellano resumió la eutanasia como "el ejercicio de la libertad del ser humano para decidir el final de su existncia de la forma menos vejatoria y más digna posible".

Por su parte, el diputado del Grupo Mixto Manuel Alcaraz, de Nueva Izquierda, recordó el caso del tetrapléjico gallego Ramón Sampedro para asegurar que no resolver esta cuestión ahora supondría resucitar el debate sobre el derecho a morir dignamente cada vez que en un futuro se produzca un caso igual.

Tanto el diputado de Coalición Canaria, Luis Mardones, como los del PNV, CiU y PSOE, Margarita Uría, Manuel Silva y Carmen Campo, respectivamene, destacaron la necesidad de regular el derecho a la eutanasia, pero advirtieron que esta cuestión necesita de un amplio consenso de todos los grupos políticos para que ese derecho se ejerza con todas las garantías.

Asimismo, PNV, PSOE y CiU se remitieron a las conclusiones que se desprendan de la comisión del Senado que estudiará los problemas que plantea el reconocimiento del derecho a una muerte digna para iniciar el debate de la despenalización de la eutanasia.

Socialistas y nacionalistas noplantearon dudas sobre el derecho de las personas a morir dignamente, pero insistieron en que es necesario regularlo de forma que ese derecho se ejerza con todas las garantías.

Por su parte, el diputado del PP Andrés Ollero resumió su intervención señalando que "un respetable altruismo moral podría justificar la solicitud de despenalización, pero un mínimo altruismo jurídico ayuda a reconocer que ello comportaría una grave irresponsabilidad".