Durante la presentación del documento, que fue aprobado hoy por la asamblea de colegios, el presidente de la comisión que lo ha redactado, Marcos Gómez Sancho, señaló que la eutanasia es un problema esencialente asistencial, porque detrás de una petición de ayuda para acabar con la prpia vida se esconde una atención deficiente.

El doctor Gómez Sancho, actual presidente del Colegio de Médicos de Las Palmas y ex presidente de la Sociedad Española de Cuidados Paliativos, explicó que sólo 23.000 enfermos terminales se benefician de los 206 programas especializados en Paliativos que existen en el país, cuando sólo por cáncer mueren 91.000 personas al año.

Lamentó que el Plan Nacional de Cuidados Paliativos, que fue aprobado por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Slud en enero de 2000, no haya comenzado a desarrollarse y sólo algunas CCAA estén dando tímidos pasos para concretar medidas.

Este área asistencial ha mejorado mucho en los últimos años, aunque, en su opinión, permanece la estigmatización del tratamiento con morfina, "cuando está científicamente demostrado que el consumo de morfina como analgésico no produce dependencia", dijo.

EUTANASIA PASIVA

Para los médicos españoles el término eutanasia pasiva debe desterrarse porque el hecho de evitar intrvenciones innecesarias a un paciente terminal, que no modifican sustancialmente el curso de la enfermedad, no debe considerarse eutanasia pasiva, "sino respeto al enfermo y a sus familias, que han sido explulsados hace 30 años de los hospitales".

El documento, que será distribuido a todos los colegios, propone una atención integral y de calidad, el desarrollo de programas y servicios de Cuidados Paliativos, y la creación de comités éticos "como la mejor manera de responder adecuadamente a las necesiddes y demandas crecientes de atención".

Proponen una formación de pregrado, psotgrado y continuada que capacite a los facultativos para atender enfermos en fases avanzadas, tanto en el control de síntomas, como en el apoyo emocional. "El desarrollo y la práctica de estos principios representan la síntesis entre la mejor tradición humanitaira de la Medicina con todos los avances científicos que han permitido mejorar la calidad de vida y la dignidad de nuestros enfermos", añade.