UGT advierte a los trabajadores de que quienes acudan a su puesto de trabajo "lo harán de forma voluntaria y asumiendo su responsabilidad ante las poibles incidencias" que se puedan producir.

Las direcciones que obliguen a la apertura de oficinas serán las únicas responsables de todas las acciones legales que pudieran derivarse de las incidencias de ese día. UGT apoyará cualquier denuncia que se promueva contra la apertura.

Asimismo, UGT insiste en la ilegalidad de abrir el 1 de enero, ya que los convenios colectivos vigentes no establecen esta posibilidad. Como las patronales bancarias se han negado a negociar, la apertura "carece totalmentede legitimidad".

El pago de cualquier cantidad por acudir a trabajar "no lo convierte en legal y tampoco consolida nada para el futuro", añade el comunicado.