Desde el 1 de septiembre de 2000, estos productos alimenticios deben indicar en su etiquetado el número de referencia de la res a la que corresponden, el país donde se encuentra el matadero en el que se sacrificó y su número de autorización sanitaria, y el país y número de autorización de la sala de despiece.

El Ministerio de Agricultura ha publicado una orden, que hoy entró envigor, por la que se regula el acceso de los mataderos a la base de datos del Sistema Nacional de Identificación y Registro de los Movimientos de los Bovinos para que puedan incluir en el etiquetado de los productos los datos obligatorios a partir del 1 de enero de 2002 por la normativa comunitaria.