Los magistrados de la Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional le han condenado por un delito de atentado y otro de estragos.

El atentado fue perpetrado el 22 de septiembre de 1990 por el "comando Ipar Haizea" contra el acuartelamiento del Cuerpo Nacional de Policía situado en Aldapeta, Consistió en el ataque con unos tubos lanzagranadas JK colocados en una furgoneta robada y previamente programados para que se activasen a las seis horas.

De las tres granadas que se lanzaron contra el citado edificio del Cuerpo Nacional de Policía, sólo una explotó, sin causar apenas daños.

Los magistrados consideran probado que, desde la detención de Santiago Arróspide Sarasola, alias "Santi Potros", en 1987,José Javier Zabaleta Elósegui era el responsable de los comandos operativos de ETA en España.

Asimismo, sostienen que "Baldo" ordenaba materialmente a Jesús Arcauz Arana las entregas a los comandos del armamento necesario para realizar las acciones terroristas.

A partir de 1988, Arcauz Arana era la única persona dentro de la organización que conocía el lugar exacto en el que se depositaba el material necesario para cometer los atentados.

Los magistrados consideran probado que las granadas utilizadas en el citado atentado fueron suministrada por Arcauz Arana, "como responsable de todo el material mortífero de ETA", al "comando Ipar Haizea".