ETA.EL SUICIDIO DE HERNANDO GONZALEZ ES EL TERCERO DE 1997 PROTAGONIZADO POR ETARRAS
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El suicidio de Juan Carlos Hernando González es el tercero de 1997 que tiene como protagonista a un etarra, las otras dos muertes se produjeron en el intervalo de tres días el pasado mes de febrero.
Los anteriores suicidios se produjeron los días 7 y 10 de febrero de 1997. Se trataba del presunto etara José María Aranzamendi Arburu, de 41 años, y del miembro de la Mesa Nacional de Herri Batasuna (HB) Eugenio Aranburu, de 42.
En torno a las 7 de la tarde del día 7 de febrero, José María Aranzamendi Arburu, natural de Elorrio (Vizcaya), de 41 años, que estaba en prisión preventiva por los delitos de pertenencia a banda armada, asesinato y atentado, fue hallado muerto alrededor de las siete de la tarde.
El cadáver estaba colgado de una bufanda en una rejilla de ventilación de la celda que ocupab en la prisión de Madrid-II (Alcalá Meco), según informó entonces la Dirección General de Instituciones Penitenciarias.
en su celda se encontró una nota manuscrita en la que el fallecido pedía que se entregaran todas sus pertenencias a su compañero de módulo José Antonio Urrutikoetxea Bengoetxea, alias 'Josu Ternera'. Hasta entonces, la última muerte de un etarra en prisión se había producido en 1988.
Aranzamendi fue detenido por la Guardia Civil el 27 de febrero de 1995 en su localidad natal, juto a Jorge Velasco Linares y María Cristina Balenciaga Arruabarrena. Los tres eran sospechoso de haber ocultado en sus domicilios a miembros del 'comando Vizcaya'.
Según fuentes de Interior, Aranzamendi acudió al mediodía anterior al comedor de la prisión, sin que nadie apreciara nada extraño. Tras el almuerzo no se le volvió a ver, lo que hizo pensar que había decidido quedarse en su celda a estudiar o a leer, como hacía frecuentemente. Sobre las siete de la tarde, cuando el funcionario de servicio e el módulo realizaba el recuento rutinario, descubrió el cuerpo del recluso colgado de la rejilla de ventilación. A través de los agujeros, había introducido una cuerda y había anudado a ésta una bufanda.
Medios penintenciarios indicaron entonces que el suicida recibía "tratamiento psiquiátrico frecuente" por sufrir ansiedad y depresión. En los últimos días se mostraba taciturno y cabizbajo, aunque participaba en las actividades de un taller de carpintería y recibía visitas periódicas de su familia.SE AHORCA EN EL CASERIO EN EL QUE NACIO
Tres días después de la muerte de Aranzamendi, el lunes 10, el miembro de la Mesa Nacional de HB Eugenio Aranburu, alias 'Txo', fue encontrado colgado de una soga en el diván del caserío donde nació y propiedad de su hermano, en el municipio vizcaíno de Mallabia.
El cadáver de Aranburu, concejal de Mallabia y miembro del sindicato abertzale LAB, fue hallado por su sobrina sobre las 12,30 horas. Miembros de HB afirmaron que Aranburu había "muerto en combate"y que había sido una "víctima de la represión y la ceguera del Estado".
Familiares de Aranburu, quien había sido citado para declarar el mismo día de su muerte, aseguraron que no habían visto nada anormal en su comportamiento que les hiciese sospechar del fatal desenlace.
El domingo anterior, Aranburu estuvo, como acostumbraba, en los bares de Mallabia. Comentó con los compañeros de partido su previsible encarcelamiento por ser uno de los 25 imputados en la causa que sigue el Supremo contra la diección de HB por difundir el vídeo de ETA y ayer tenía previsto cenar en esa localidad con otros miembros de HB y esperar con ellos la llegada de la Ertzaintza con su orden de detención.
El entorno de ETA acompañó la muerte de Aranburu con distintos incidentes. Una mujer fue agredida y herida leve en Bilbao. Una manifestación en Pamplona terminó con dos policías heridos y tres manifestantes detenidos. Jóvenes enmascarados atacaron una central de Telefónica, una estación de tren y una sucursal bancariaen distintos puntos de Guipúzcoa.
EL ULTIMO SUICIDIO OCURRIO EN 1988
Desde 1988 no se producía ninguna muerte por suicido de personas relacionadas con el entorno terrorista. En marzo de ese año, el etarra Mikel Lopetegi Larrarte se suicidó en su celda de la cárcel de Herrera de la Mancha, ahorcándose con una sábana retorcida a modo de soga.
La autopsia concluyó que la causa de la muerte había sido "asfixia por suspensión", sin que el cuerpo del etarra presentara lesiones externas, salvo un "suro de ahorcamiento" alrededor del cuello.
Mikel Lopetegi cumplía condena de 30 años por atentado con resultado de muerte. Estaba además implicado en cinco asesinatos. En aquella ocasión, antes de que se conociera el resutaldo de la autopsia, HB dictaminó que la muerte del etarra había sido un asesinato.
En 1985, un recluso de ETA se ahorcó también en Alcalá-Meco. Se trataba de José Ramón Goicochea Bilbao, de 25 años, quien dejó una carta a su novia en la que le explicaba el motivo de su suicidio: No puedo aguantar más".
(SERVIMEDIA)
21 Jul 1997
VBR