Para UGT, la decisión de ETA supone "un serio retroceso en el camino de la convivencia en paz", cuyo único responsable es, a su juicio, la organización terrorista, a la que acusa de intentar, una vez más, socavar la democracia "condicionando y chantajeando a todos los ciudadanos".

UGT proclama que la libertad y la paz son de todos, y exige a todos los partidos políticos democráticos "su entendimiento, sin fisuras, para rechazar la imposición de os liberticidas y de los violentos", y, a partir de ahí, seguir buscando una salida democrática a la situación planteada.

La central que lidera Cándido Méndez cree que hoy está en juego el futuro del propio sistema democrático, por lo que "llamamos a todos los demócratas, a todos los que rechazamos la violencia y el terror, para que sin disputas ni fracturas, todos a una, trabajemos en defensa del sistema democrático y de las libertades, plantando cara a ETA, que busca minar las bases de la democraciahaciendo imposible la convivencia en paz".