Según el rector de la universidad bilbaina, Lidón era un hombre muy cercano a todos, tras ejercer como profesor en este centro durante veintinueve años. "José Mari Lidón era una persona muy cercana, muy afable, muy cordial y muy íntegra", indicó a la Ser.

Para explicar la situación que a su juicio se vive en el País Vasco, José María Abrego utilizó l siguiente metáfora: "En la sociedad vasca, a partir del piso 50 están ardiendo los pisos, y tengo mucho miedo de que se funda todo el hierro y que caiga toda la sociedad y toda la torre con todos los muertos".

En su opinión, en el País Vasco "hay una enorme cicatriz que va a tardar muchos años en curar, entre víctimas y asesinos, entre quienes decían a los otros que miraban para otro lado y a los otros que no hacían nada por intentar la paz..., y esto va a ser muy difícil".

Finalmente, el rectorde la Universidad de Deusto expresó su deseo de que "no seamos el único reducto de Europa en donde se intentan defender con muertes humanas pseudoideas".