El secretario de Libertades Públicas de la Ejecutiva socialista, Juan Fernando López Aguilar, dijoServimedia que es obligada la reunión del Pacto, puesto que el PP "lo firmó y está vinculado" al mismo.

Destacó que este acuerdo "no es, ni mucho menos, un monopolio" de los populares, ni algo que dependa de sus "estados de ánimo" o sus "intereses electorales", por lo que debe reunirse para tratar las reformas que promueve el Ejecutivo.

"Todo el Gobierno y el PP están vinculados por lo que José María Aznar firmó en La Moncloa", indicó, por lo que se mostró convencido de que esta reunión se produirá a lo largo del mes de enero.

López Aguilar acusó al PP de "deslealtad" e "insinceridad", ya que el Pacto Antiterrorista establece que las iniciativas legislativas que tengan que ver con la lucha contra ETA hay que apartarlas de la pugna electoral y "negociarlas procurando el máximo consenso".

Por este motivo, el dirigente socialista censuró el "oportunismo" y los "trucos escénicos" del PP, ya que, a su juicio, con estos cambios legales en materia antiterrorista y de seguridad pretende desviarla atención con respecto a otros asuntos.

Además de la reunión del Pacto anti-ETA, López Aguilar dijo que para que las reformas cuenten con el apoyo de los socialista es necesario que se tengan en cuenta los "límites" que establece la Constitución, que contempla la reinserción de los presos.

"Nosotros queremos", indicó, "que la reinserción marque siempre una diferencia entre el etarra que se arrepiente y el etarra recalcitrante, entre el etarra que condena el terrorismo y el que no lo hace".

Concluyó que otra condición del PSOE es hablar de la eficacia en materia antiterrorista y de lucha contra la delincuencia de manera no "propagandística". Explicó que esto supone que hay que decir a los españoles cosas como que las penas de 40 años para los etarras no serán efectivas hasta 2033, ya que no serán aplicables a los presos de la banda que están ahora en prisión.