Barrio declaró a Servimedia que acciones como el robo de coches en Francia o la exigencia del impuesto revolucionario, prueban que ETA "sigue siendo una organización terrorista" y que "su voluntad todavía se instala en la coacción, la presión y la posibilidad del uso d la violencia".

Para el dirigente del PP vasco, la organización armada "lo que quiere es conseguir un precio político por la paz" y por eso, desde el principio, dio a conocer que seguiría manteniendo su infraestructura aunque no cometiese atentados.

Aseguró que todo esto prueba que "si este proceso no va como a ETA le gusta, volverá a su estrategia criminal" y realizará nuevas acciones terroristas.

Por otra parte, Barrio se refirió a la nueva mesa de diálogo solicitada por el 'lehendakari', uan José Ibarretxe, y aseguró que su partido sigue confiando en Ajuria Enea y que no se sentará con Euskal Herritarrok mientras no condene la violencia.