"La decisión del alcalde del PNV de Markina de aceptar prestar a EH el salón de plenos del ayuntamiento para celebrar un homenaje a un asesino que falleció la semana pasada víctima de su propia locura, es una infamia y un insulto contra los que han sido víctimas de ese asesino, sus familias y la conciencia de cualquier ciudadno demócrata y de bien de este país", dijo Hernando a Servimedia.

Para el portavoz popular, "esa decisión es consecuencia directa de la política ambigua que practican el señor Arzalluz y el señor Egibar (presidente y portavoz del PNV, respectivamente) respecto de la violencia y de su entorno, política que a veces incluso llega a ser comprensiva con ese entorno".

"Si bien es cierto", dijo Hernando, que la dirección del PNV en Vizcaya "se ha desmarcado de esa decisión en una nota oficial", "lo que n estos momentos cabe, si esa voluntad de desmarcarse de esa decisión es real, es que el propio PNV pida al Gobierno vasco que adopte medidas para impedir un acto como ese que, sin duda, constituye en sí mismo toda una apología del terrorismo y de la violencia".

Hernando consideró "chocante" que mientras que en el resto de Europa "todas las fuerzas políticas democráticas luchan como una sola frente al nazismo, aquí haya todavía personas presuntamente democráticas que acepten el juego de unos violentosy de personas que se comportan como auténticos nazis".