Esta declaración, que fue leída antes del inicio del Debate de investidura, asegura que la voluntad de la Cámara autonómica vasca y de la inmensa mayoría de los ciudadanos es seguir trabajando para acabar con la banda criminal, puesto que es "el enemigo del país".

En este sentido, el comunicado afirma que l País Vasco "tiene que reaccionar unido para defender las libertades y salvaguardar su futuro, contribuyendo así a la consecución de la libertad y la paz".

Para el Parlamento Vasco, el asesinato de ayer es un "nuevo ejemplo de la cobardía e inhumanidad de sus autores, que han vuelto a protagonizar un acto que certifica su miseria moral y la de quienes apoyan esta siniestra actividad".

El comunicado expresa el convencimiento de que la "violencia es políticamente estéril", y genera el rechazo de l inmensa mayoría de la población "como procedimiento para conseguir objetivos políticos".

La Cámara se solidariza, asimismo, con la familia del agente asesinado y con el Cuerpo Nacional de Policía, al tiempo muestra su respaldo a las fuerzas de seguridad para que actúen contra la violencia terrorista.

Además de aprobar esta condena del atentado de Madrid, los parlamentarios guardaron antes del inicio de la sesión un minuto de silencio en memoria del policía asesinado en Madrid.