En torno a esas fechas, los operativos antiterroristas pudieron captar comunicaciones internas de la organización, algunas de ellas telefónicas, en las que se decía textualmente "los de abajo que se suban".

Pocos días antes, el 9 y 10 de marzo, detuvieon a José Luis Arizcuren Ruiz 'Kantauri', jefe de los "comandos ilegales", así como a los integrantes del último "comando Donosti", entre otros. La policía tiene el convencimiento de que esa orden fue acatada también por los dos terroristas que seguían en Madrid al conde de Siruela, Julia Moreno Macuso y Javier Abaunza.

Esas mismas fuentes confirman la renovación efectuada por ETA en plena tregua de los integrantes de los "comandos operativos". A Mercedes Chivite o Patxi Rementería, dos de los etarrasque pertenecían a "comandos liberados" de ETA, hay que sumar los tres integrantes de una "talde" de reserva que estuvo a punto de cruzar la frontera hacia España.

Los tres miembros del "talde" llegaron a reunirse en una de las casas en las que se les concentra habitualmente antes del traslado a España. La orden de marzo puso fin a cualquier despliegue de la banda. Poco después se iniciaron los preparativos para el primer encuentro ETA-Gobierno.