Se trata de Fernando García Jodrá, Lierne Armendáriz González, Zigor Larredonda y Laura Riera Valenciano, presuntos miembros del "comando Gaztelugatze" de ETA los dos primeros, y supuestos colaboradores del talde lo dos últimos.

Según la investigación del juez Garzón, con la colaboración "imprescindible" de Laura Riera Valencianoy Zigor Larredonda Muñoz, Fernando García Jodrá consiguió los datos de la matrícula del vehículo que habitualmente utilizaba Fernando Cano Consuegra y los de su domicilio.

Laura Riera Valenciano, trabajadora interina del Ayuntamiento de Terrasa, era íntima amiga de Zigor Larredonda, por lo que le facilitaba todos los datos que le pedía, aún sabiendo que compañero mantenía relaciones con ETA y los fines con que utilizaría la información que le daba.

El 17 de julio de 2000, Fernando García Jodrá, tas conocer los datos que le facilita Zigor Larredonda, decide acabar con la vida de Francisco Cano.

Zigor Larredonda y Laura Valenciano fueron los encargados de seguir los movimientos de la víctima, con el fin de preparar el atentado.

Por su parte, Lierne Armendáriz y Fernando García Jodrá fueron los responables de abrir el vehículo y colocar bajo el asiento del conductor una caja metálica con un kilo de explosivos, el 14 de diciembre de 2000.

Ese mismo día, sobre las 10,30 horas, la víctimaconducía su vehículo cuando la carga hizo explosión, "destrozando al turismo y a su ocupante". Francisco Cano Consuegra, tenía 45 años, estaba casado y tenía dos hijas,

Para el magistrado, los hechos descritos podrían ser constitutivos de un delito de estragos y otro de asesinato terrorista imputables a Fernando García Jodrá, Lierne Armendáriz, Zigor Larredonda y Laura Riera Valenciano.