El magistrado tomó esta decisión a petición del fiscal adscrito a su juzgado, Jesús Santos, por su presuta pertenencia al "comando Madrid" y por las distintas acciones que supuestamente han cometido como miembros de dicho grupo armado de ETA.

El juez les imputa a ambos los presuntos delitos de pertenencia a banda armda, depósito de armas y de explosivos, un delito continuado de falsificacion en documento oficial, otro de sustración de vehículo.

Además, atribuye a Ana Belén Egüés trece presuntos delitos de asesinato terrorista, tres de ellos en grado de tentativa; y siete delitos de conspiración par el asesinato.

Asimismo, imputa a Aitor García tres presuntos delitos de estragos terroristas, ocho de asesinato (cuatro de ellos en grado de tentativa), otros ocho de conspiración para el asesinato.

Según fuentes jurídicas, Ana Belén Egüés no quiso ratificar la declaración prestada ante la Policía, según la cual entre los objetivos del "comando Madrid" se encontraban magistrados y fiscales tanto de la Audiencia Nacional como del Tribunal Supremo, así como miembros del Tribunal de Cuentas.

Drante su comparecencia policial, Ana Belen Egüés señaló también, según las mismas fuentes, que recibía órdenes del presunto dirigente de ETA Javier García Gaztelu, alias "Txapote"; posteriormente de Ainoa Múgica y más tarde de Jon Guridi.

Por su parte, siempre según las mismas fuentes, Aitor García reconoció ante el juez que se incorporó al "Comando Madrid" en abril y que anterioremente había sido miembro de un "talde" de apoyo en Vitoria, al tiempo que reconoció su participación en los hechos que se e imputan.