A su salida del juicio que hoy tuvo lugar en la Audiencia Nacional contra Valentín Lasarte, quien supuestamente participó en el atentado que costó la vida a su marido, Catalina Romero dijo que "hay mucha diferencia cuando el asesinado es un político y cuando el asesinado es un policía o gente de la calle".

Se quejó de indefensión al encontrarse sola cuando ETA asesinó a su marido, pero reconoció que "he tenido suerte e contar con el apoyo de los abogados de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), aunque en otros casos incluso el colegio de Abogados de Guipúzcoa haya apoyado a las víctimas", dijo en referencia al apoyo de este organismo en el juicio por el asesinato de Fernando Múgica.

Al inicio del juicio, antes de que Valentín Lasarte se negara a declarar y abandonara la sala de la Audiencia Nacional, la viuda se dirigió a él y le gritó "txakurra" (perro) y "malnacido".

"Me he sentido muy mal duranteel juicio, fatal. Tienes enfrente al asesino y sientes deseos de gritarle todo", dijo a la salida, y puntualizó que hubiera dicho a Lasarte que "le deseo todo el mal. Que su vida sea como la que yo vivo todos los días durante los últimos 3 años".

El juicio quedó hoy visto para sentencia. El fiscal, que pide 28 años de prisión para Valentín Lasarte como cooperador necesario en el asesinato de Morcillo, dijo que el caso estaba "clarísimo" y apeló a la propia declaración del etarra y a que el arma utilizda fue la misma que se usó para asesinar al dirigente popular Gregorio Ordóñez y al policía Enrique Nieto.

Finalmente, la defensa de Lasarte apuntó que las únicas pruebas contra su defendido eran su propia declaración y que éstas se habían realizado bajo torturas psicológicas.