ETA. HARRIET IRAGI E IGOR SOLANA, JUZGADOS POR EL ASESINATO DEL FISCAL LUIS PORTERO

- Se enfrentan a una petición de 54 años de cárcel para cada uno de ellos

MADRID
SERVIMEDIA

La Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional comienza hoy el juicio conta Harriet Iragi e Igor Solana, miembros del "comando Andalucía" de ETA, por su presunta participación en el asesinato, en octubre de 2000, del entonces fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, Luis Portero García.

Según el escrito de conclusiones provisionales, la Fiscalía de la Audiencia Nacional considera probado que, tras comprobar los datos sobre el domicilio, horarios de trabajo, matrícula y detalles del coche oficial que utilizaba Portero, Iragi y Solana acudieron el 9 de octure de 2000 al lugar donde residía el fiscal y le esperaron dentro del edificio.

Sobre las 14,15 horas, cuando Luis Portero esperaba el ascensor, "el procesado Harriet Iragui Gurruchaga se le aproximó súbita y repentinamente -consciente de que de este modo imposibilitaba cualquier defensa-, situó la pistola que portaba (...) a una distancia de 15 centímetros del rostro e hizo fuego por dos veces".

Luis Portero contaba 54 años cuando le asesinaron, tenía mujer y cuatro hijos. Además de dirigir la Fscalía del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, impartía clases en la Universidad de Granada.

Tras el asesinato, y para facilitar la huida, Iragi y Solana explosionaron un vehículo que habían robado y al que habían cambiado las placas de la matrícula. La deflagración causó diversos daños materiales en los coches y edificios cercanos.

La Fiscalía de la Audiencia Nacional considera probado que los dos procesados son culpables de cuatro delitos: asesinato terrorista, robo, falsificación documntal y estragos, por los que pide un total de 54 años de cárcel para cada uno de ellos.

La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ya condenó a estos terroristas en dos ocasiones. En primer lugar, los magistrados les impusieron una pena de quince años de prisión por la colocación de una fiambrera-bomba en el coche particular de un militar que circuló varios días en el vehículo sin que el artefacto explotara.

Además, esta misma sala les impuso una condena de 30 años de cárcel a cada uno por el aesinato del concejal del PP en Málaga José María Martín Carpena, perpetrado el 15 de julio de 2000.

(SERVIMEDIA)
16 Sep 2002
VBR