En esa fecha, "Hankas" e Idoia Martínez vivían en la capital de España como liberados del "comando Madrid" de ETA y al parecer controlaban un convoy militar para atentar contra él.

En las proximidades de a calle Arturo Soria, cerca del lugar donde más tarde se produjo el atentado contra José María Aznar, hecho en el que Hankas ha negado su participación, fueron requeridos por dos policías municipales que sospecharon de ellos y les exigieron identificarse.

Al parecer, "Hankas", en el momento en que iba a mostrar la documentación, sacó una pistola y desarmó a los municipales, dándose luego a la fuga junto con su acompañante. Más tarde, se demostró que se trataba de un coche robado, con las placas de matícula cambiadas.

El miembro de ETA declaró que había robado el coche para enseñar a conducir a Idoia Martínez y que se dirigían a un descampado para hacer prácticas de conduccción, cuando fueron requeridos por los municipales.

"Hankas" y su compañera huyeron entonces a Francia, asustados por la posibilidad de ser reconocidos y también para evitar resultar "quemados", al poder ser identificados por dos policías.

De hecho, ambos municipales comparecieron hoy en dependencias judiciales y reconoieron a "Hankas" como la persona que les desarmó en Madrid, acompañado de una mujer.

El fiscal pide para Mikel Azurmendi 36 años de prisión por su participación en estos hechos y le acusa de los delitos de pertenencia a banda armada, tenencia ilícita de armas, robo con intimidación, sustitución de placas de matrícula y uso ilegítimo de vehículo a motor.