ETA HA ENVIADO ESTE AÑO CUATRO OLEADAS DE CARTAS PARA RECLAMAR EL "IMPUESTO REVOLUCIONARIO"
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La banda terrorista ETA ha enviado en 2005 al menos cuatro oleadas de cartas de extorsión del llamado "impuesto revolucionario", en las que exige a empresarios del País Vasco y Navarra el pago de una cantidad de dinero si no quieren ser objeto de atentados terroristas.
Fuentes empresariales informaron a Servimedia de que han constatado que estas remesas de cartas han llegado a sus destinatarios en una primera oleada recibida entre febrero y marzo, así como en otras que se registraron en junio, agosto y noviembre.
Las fuentes consultadas aseguraron que este año la banda etarra ha seguido con su estrategia de los últimos tiempos de ampliar el espectro de destinatarios de sus intentos de chantaje a empresas cada vez más pequeñas y a distintos profesionales.
Junto a la exigencia del "impuesto revolucionario", la organización criminal ha enviado en los últimos meses otras cartas a hosteleros y propietarios de distintos negocios, en las que les insta a no comprar productos de empresas que no pagan el "impuesto revolucionario".
REIVINDICACION
La propia ETA reinvidicó este miércoles, a través de un comunicado en el diario "Gara", los últimos 21 artefactos explosivos que ha colocado, entre ellos los de empresas que se niegan a "aportar ayuda económica en favor de la libertad de Euskal Herria".
A este respecto, según datos del Ministerio del Interior, durante este año se han producido un total de 11 ataques a sedes de empresas, el más grave de los cuales tuvo lugar el pasado día 21, cuando los etarras colocaron en el municipio Santesteban una furgoneta-bomba junto a una discoteca, que sufrió importantes daños y deberá ser derruida.
En este sentido, se registraron atentados relacionados con el impuesto revolucionario los meses de enero, mayo, julio, noviembre y diciembre, siendo este último cuando tuvieron lugar mayor número de ataques.
En concreto, en diciembre ETA atentó contra la discoteca de Santesteban, colocó una potente bomba en las instalaciones de la empresa Angulas Aguinaga, en el polígono industrial Laskibar de Irura (Guipúzcoa), e hizo estallar otro artefacto en la sede que Transportes Azkar tiene en la localidad guipuzcoana de Lazkao.
Se da la circunstancia de que este año la organización terrorista ha actuado, incluso, contra las instalaciones de compañías productoras de vino, como bodegas "El Coto", situada en la localidad alavesa de Oyón, o la bodega "Rioja Alta" de Haro (La Rioja).
(SERVIMEDIA)
29 Dic 2005
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