En las dos viviendas que los terroristas tenían en Barcelona, situadas en el número 475 de la calle Aragón y en el 204 de la calle Padilla, ambas en el barrio del Eixample, la policía encontró 40 kilos de amosal y 10 kilos de ameritol empaquetados en 'tetrabriks'.

Asimismo, había diversas cajas e iniciadores de explosivos, tornillos, tuercas y tacos de hierro, abundante material electrónico, temporizadores, detonadores, un radiotransmisor, taladros y una baca de automóvil.

Entre el material expuesto por la policía a los medios de comunicación este mediodía también se encontraban dos cubos con restos de material plástico que sobró de la fabricación de los tubos lanzagranadas supuestamente utilizados por el comando en el atentado del pasado 18 de abril contra el Gobierno Militar de Barcelona. En el arsenal incautado figura una metralleta MAP de fabricación francesa con dos cargadores, una pistola de 9 milímetros 'Parabellum' y varias cajas de munición para dos armas, además de 6 bigotes postizos y un carné falso del Cuerpo Nacional de Policía.

En los dos pisos había también varias ollas de cocina, una de ellas cargada con explosivos que tuvo que ser desactivada por los efectivos de los Tedax.

El gobernador civil de Barcelona, Jaume Casanovas, explicó que ETA tenía en Barcelona exposivos suficientes para seguir con su "actividad sanguinaria" y pidió la comprensión de los ciudadanos ante los controles que se realizan para localizar a los tres etarras que fueron identificados tras la detención de 'Pipe'.

San Epifanio permanecía hoy en dependencias policiales de Barcelona para seguir declarando, según fuentes de la policía, aunque en las próximas horas deberá pasar a disposición de la Audiencia Nacional.

Por otro lado, las fuerzas de Seguridad del Estado han desplegado un fuete dispositivo de seguridad en Barcelona para detener a estos tres etarras y se han establecido controles policiales selectivos en los accesos a la ciudad y en algunas calles.