Garzón solicitó el libro contable y otros documentos de "Ardi Beltza" tras celebrar la vistilla por la que comunicó su intención de clausurar el citado edio de comunicación, en virtud del artículo 129 del Código Penal, que recoge los requisitos para clausurar una empresa, en este caso la revista dirigida por Rei.

El titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional tomará una decisión sobre la clausura de "Ardi Beltza" más adelante, tras analizar los nuevos datos que le aporten la documentación solicitada.

Según las mismas fuentes jurídicas, el representante legal de "Ardi Beltza", Ahotzar Zelayeta, comunicó a Garzón qe se opone a la clausura de la revista porque atenta contra la libertad de expresión y porque dejaría a muchas personas en el paro.

Para el magistrado, según la investigación llevada a cabo, "no puede obviarse la existencia y actividad de la misma revista "Ardi Beltza" y su conceptuación como instrumento y vehículo" de la actividad presuntamente terrorista.

Precisamente por su actuación en "Ardi Beltza", Garzón procesó a Rei por un presunto delito de pertenencia a banda armada. El juez sostiene qe la actividad del mencionado periodista en dicho medio de comunicación "es la propia de quien, integrado en una organización criminal, desarrolla actos directamente dirigidos a conseguir los mismos fines de aquélla".

El juez apoya la tesis del fiscal Molina, para quien Rei utiliza con "Ardi Beltza" la misma metodología que empleaba en "Egin", así como el mismo equipo de investigación que trabajaba en el extinto diario vasco, y sigue marcando los objetivos de ETA de la misma forma que lo hacía en el etinto rotativo, clausurado en julio de 1998.