Concretamente, la fiscalía cree ue la extradición de Rosario Delgado, detenida el pasado domingo en Bayona (Francia), debe solicitarse por los delitos de asesinato, pertenencia a banda armada, depósito de armas de guerra y tenencia de explosivos.

Según el auto de procesamiento dictado en mayo de 1985, Rosario Delgado formaba parte del denominado "comando Madrid", que se encargó de obtener "amplia información" sobre la vivienda, lugar de trabajo y horarios del entonces director general del Banco Central, Ricardo Tejero Magro.

Lo datos obtenidos fueron facilitados a Ignacio Aracama Mendía y José Luis Urrusolo Sistiaga, quienes el 19 de febrero de 1985 se dirigieron al domicilio del banquero y se introdujeron en el garaje haciéndose pasar por policías. Cuando Ricardo Tejero bajó al lugar, los terroristas le dispararon, provocándole la muerte inmediata. Para la fiscalía, estos hechos son constitutivos de asesinato y pertenencia a banda armada.

La otra causa por la que la Fiscalía de la Audiencia Nacional cree que debe ser extraitada es por haber entregado presuntamente a otro a miembro de ETA unas bolsas de deporte con armas y explosivos, los cuales fueron encontrados en dos pisos de Ermua, localidad natal de Rosario Delgado, durante un registro policial efectuado en 1992.

Según el auto de procesamiento, Rosario Delgado entregó las armas y los explosivos antes de huir de España en 1988. Para la Fiscalía de la Audiencia Nacional, los hechos descritos son constitutivos de pertenencia a banda armada, depósito de armas de guerr y tenencia de explosivos.

Según las mismas fuentes jurídicas, Rosario Delgado también está procesada por su presunta implicación en el "caso Sokoa". Concretamente, se le imputan los delitos de integración en banda terrorista, depósito de armas de guerra y tenencia de explosivos.

En este sumario también están acusados el miembro de ETA Eugenio Etxebeste, alias "Antxon"; José Ignacio Aracama Mendía, alias "Makario", y el "arrepentido" Juan Manuel Soares Gamboa.

Este caso surgió tras el desmanelamiento de la cooperativa Sokoa, ubicada en Hendaya (Francia), donde fueron hallados un arsenal de armas de ETA y abundante documentación de la banda terrorista.

Las mismas fuentes señalaron que aunque Delgado estuvo procesada también por su presunta implicación en el atentado con coche-bomba perpetrado el 10 de febrero de 1992 contra la Comandancia de la Guardia Civil en Murcia y que costó la vida al policía Angel García Rabadán, lo cierto es que finalmente las acusaciones fueron levantada, por lo ue son tres y no cuatro las causas que tiene pendientes en la Audiencia Nacional.