En su escrito de conclusiones provisionales, el fiscal Enrique Molina considera probado que sobre las 730 de la tarde, Joseba Inmanol Sein, junto con una veintena de personas, atacó con artefactos incendiarios las sucursales de la Kutxa de Empresas, el Banco Central Hispano Americanao y la Caja Laboral Popular.

El grupo se dirigió primero a la sucursal de la Kutxa de Empresas, donde rompieron las lunas con mazas de hierro, lanzaron los 'cócteles molotov' a su interior y destruyeron "totalmente" el establecimiento, causando daños materiales por valor 68.288.725 pesetas.

A continuación, emplando el ismo método, incendiaron las sucursales de la Caja Laboral, causando daños por valor de 3.988.173 pesetas, del Banco Central Hispano Americano, provocando desperfectos valorados en 686.367 pesetas, y en la Kutxa, donde los estragos se cifraron en 1.844.579 pesetas.

Según el fiscal, los incendios de las sucursales afectaron también a un total de 10 viviendas, donde los desperfectos materiales alcanzaron 10.024.989 pesetas. Dos personas de avanzada edad se vieron afectadas por el humo que se introdujo e sus casas, por lo que tuvieron que ser trasladadas a un hospital.

El acusado fue detenido cuando una patrulla de la Policía Autonóma Vasca, informada de los altercados, encontró a una veintena de personas que se estaban despojando de las prendas que cubrían sus cabezas y ocultaban sus rostros. El grupo se dio a la fuga al ver a los agentes, quienes detuvieron al procesado.

Así, se le intervino la mochila, en cuyo interior había ocho artefactos incendiarios preparados para su utilización, dos mazs de hierro y un envase con líquido inflamable. Además, se comprobó que sus huellas coincidían con las halladas en un paquete encontrado por la Ertzaintza varios días antes.

En dicho paquete se encontró papel de aluminio, cinco guantes de látex, un trozo de madera con el anagrama de ETA, cuatro cajas de clorato potásico y dos cartuchos detonadores.

Para el fiscal Molina, Joseba Inmanol Sein Narbarte es responsable de un delito de colaboración con banda armada, otro de incendio y de dos faltas de esiones, por lo que solicita que sea condenado a un total de 27 años de prisión, 8 fines de semana de arresto, una multa de 170.000 pesetas e indemnizar a los damnificados por los daños materiales causados.