"Sabía como funcionaba esta gente (de ETA) y que en un momento dado podían atacarme. Yo no pedía nada. Sólo me quejé a mi partido y en el partido la verdad es que nadie se ha movido hasta que mataron a Juan María. Entonces, una hora después, el mismo que me dijo que me quitaba la escolta me llamó para decirme que me la ponían. Así se funciona", ha declarado Arranz a la Ser.

Le habían quitado la escolta porque, después de cuatro años de deja el cargo, en 1996, la Secretaría de Estado para la Seguridad entendía que ya no era objetivo preferente de los terroristas. "Que no había gente (suficiente), que tenían que dar servicio a muchos otros (amenazados)", fue el argumento que le dieron.

Arranz, actualmente está en paro, asegura que no gaurda rencor por no tener trabajo, porque sabía a qué atenerse cuando entró en política y no está "tirando de la levita" para ocupar un puesto de responsabilidad.

No obstante, el ex dirigente socialistaseñala que no se va a ir del País Vaco porque prefiere "morir de un tiro que por desolación de estar fuera del País Vasco".

Respecto a los socialistas, asegura que su impresión es que "no lo estamos haciendo todo lo bien que se tiene que hacer", aunque es optimista con el cambio que ha supuesto la llegada de José Luis Rodríguez Zapatero a la Secretaría general.

Daniel Arranz ha recomendado a Zapatero qe deje de oír "ciertas campanas en un determinado lugar" y se deje aconsejar "por quien sabe de stas cosas". "Hay gente que ha estado mucho tiempo aquí y que convive aquí. Y hay que dejar que la gente hable, porque todos tenemos parte de razón", añadió.