La sentencia ha sido impuesta por la Sección Prmera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, que considera probado que "Pakito" y "Fitipaldi" dieron órdenes a Henri Parot y a Jacques Esnal para atentar con paquetes-bomba contra empleados de las cárceles.

Así, en el verano de 1989, José María Arregui Erostarbe, considerado entonces el mayor experto en explosivos de la banda terrorista, preparó dos artefactos que simulaban sendos libros. Múgica Garmendia entregó las bombas a Parot y a Esnal para que se las remitieran a los funcionarios de prsiones Dionisio Bolívar, en Granada, y Antonio Picero, en Murcia.

La madre del primero de ellos murió al abrir el paquete que le había llegado a su hijo por correo. La deflagración hirió al hermano del funcionario de prisiones, así como a otro familiar.

En cuanto al segundo paquete, su destinatario sospechó del mismo y lo llevó a la prisión para que pasara por el detector de metales. Tras el resultado positivo, avisó a la policía para que desactivaran la bomba.

En su escrito de conclusiones,la Fiscalía estimaba que por estos hechos "Pakito" y "Fitipaldi" podían ser acusados de cuatro delitos de asesinato, uno consumado y tres frustrados, por lo que solicitaba para cada uno de estos etarras un total de 110 años de cárcel.

Múgica Garmendia, considerado el "número uno" de la banda terrorista hasta su detención en Bidart, en 1992, fue condenado en Francia a 10 años de cárcel por asociación de malhechores y tenencia ilícita de armas en 1997. Las autoridades del país vecino extraditaron a "Pakto" a España el pasado 8 de febrero.

Por su parte, Arregui Erostarbe, considerado el máximo experto en explosivos de la banda terrorista hasta su detención en Bidart, en 1992, permaneció en prisión en Francia hasta el 20 de noviembre del año 2000, cuando fue extraditado a España para hacer frente a las causas que tenía pendientes con la justicia española.