En declaraciones a Servimedia, Anasagasti consideró que esas"discrepancias" son "legítimas en una sociedad democrática donde no somos robots", y añadió que hay total unanimidad en la condena de la violencia, "donde hay distintas opiniones es en cómo abordar el final", apuntó.

"Quizá lo que tengamos que hacer es decirlo en voz baja y no públicamente", añadió Iñaki Anasagasti, "pero lo seguiremos haciendo porque no podemos dejar de tener nuestro propio perfil político".

A su juicio, el PNV tiene perfecto conocimiento de una realidad "que nos afecta muy de crca y que somos los que más lo sufrimos. Creemos tener, por lo menos, el derecho de discrepar frente a análisis que a veces lo único que hacen es poner las cosas peor". En cualquier caso, Anasagasti insistió en que esas discrepancias no impiden que la actitud frente a ETA sea firme.

Sobre las recientes declaraciones del consejero de Interior del Gobierno Vasco, Juan María Atutxa, en las que afirmaba que el "espíritu de Ermua" estaba roto, Anasagasti comentó que ese espíritu es "sólo una palabra", y loque realmente importa "es el clamor de una sociedad harta, cansada, hastiada de la violencia". En su opinión, "es mejor hablar del 'espíritu de Ajuria Enea'".