Los magistrados consideran probado que Caride Simón y Josefina Mercedes Ernaga, ya condenada por esta causa, decidieron atentar contra el mencionado cuartel barcelonés por orden e la dirección de ETA, para lo que robaron un vehículo Ford Granada, al que colocaron un artefacto explosivo.

Ese mismo día, el 14 de octubre de 1986, colocaron el vehículo en las inmediaciones del citado cuartel. Josefina Mercedes Ernaga accionó la bomba con un mando a distancia, acabando con la vida de una persona, hiriendo a 14 y causando daños materiales por valor de 30.810.987 pesetas.

Para los magistrados, los hechos descritos son constitutivos de un delito de asesinato, uno de estragos, oto de utilización ilegítima de vehículo, uno de sustitución de placas de matrícula y otros 7 más de lesiones,

Asimismo, la sala considera que los hechos descritos suponen también 7 faltas de lesiones, por lo que impone a Caride Simón un total de 102 años y 7 meses de prisión, así como una multa de 400.000 pesetas y a indemnizar a las víctimas y perjudicados por la explosión con un total de 61.376.876 pesetas.

Rafael Caride Simón, que fue extraditado el 7 de marzo de 2000 por Francia, estaba considrado el jefe del "comando Barcelona" de ETA cuando se cometió el atentado de Hipercor, el 19 de junio de 1987, en el que perdieron la vida 21 personas y 44 resultaron heridas por la explosión en el sótano del establecimiento de un coche cargado con 27 kilos de amonal y 200 litros de gasolina.