Entiende el BNG que el anuncio dela banda de que dejará de atentar en Cataluña es un "acto miserable y moralmente repugnante" y constituye un hecho "infame de su propaganda cruel y violenta".

Quintana abogó por dejar la lucha antiterrorista "fuera de la pugna electoral" y de utilizaciones partidistas y ofreció su "compromiso leal" para acabar con la violencia.

El BNG manifiesta su convicción de que ETA no debe marcar la agenda política, ni condicionar la convivencia democrática y pide la "unidad de todos los demócratas", a la ve que ofrece "una mano tendida" para fraguar un acuerdo en el que estén representados todos los demócratas.