A pesar de que el descubrimiento de la vivienda que ocupaban cuatro presuntos integrantes del 'Comando Madrid' de ETA fue casual, la policía ya había desplegado sus efectivos por el barrio al sospechar desde hacía meses que en sus alrededores podrían refugiarse terroristas.

El director general de la Policía, Juan Cotino, presentó esta tarde los explosivos, rmamento y diversos objetos hallados en el interior de la vivienda que los ocupantes no lograron llevarse durante su precipitada huída, a excepción de varias carpetas conteniendo documentación como planos de Madrid y recortes de prensa que están siendo objeto de análisis por parte de la Policía Científica y de la Brigada Antiterrorista.

Entre los objetos hallados por la policía destacan tres ametralladoras, dos subfusiles, una escopeta sin colatín, seis granadas anticarro, varios temporizadores, placa de matrícula, y unas ollas de distintas dimensiones con las que habrían fabricado artefactos explosivos.

Cotino confirmó que, según el testimonio de los vecinos, los ocupantes eran dos hombres y dos mujeres, con edades comprendidas entre los 30 y 40 años, que habitaban la vivienda desde principios del mes de febrero y cuyo contrato habían suscrito mediante identidades falsas con nombres alemanes.

De la carga explosiva hallada, que sólo en amonal suma alrededor de 100 kilos, se desprende que "haysuficiente material para hacer varios atentados", indicó el director general de la Policía. Asimismo, del conjunto de materiales hallado señaló que "no es distinto del encontrado en el piso de la calle Doctor Fleming, aunque aquí existía mucho más material explosivo".

La policía tuvo conocimiento del suceso pasadas las ocho y media de la mañana de hoy, cuando recibió la llamada de varios vecinos del edificio que alojaba el piso franco al explosionar un artefacto no identificado.

Tras la primera ispección de los bomberos, el TEDAX y la Brigada Antiterrorista confirmaron que la vivienda era habitada por terroristas a tenor del armamento y materiales explosivos hallados. Con posterioridad, el magistrado del juzgado de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón, levanto acta de lo hallado.