La AVT confía en ser la asociación más beneficiada por estas ayudas, cuyas bases recoge una orden ministerial publicada hoy por el "Boletín Oficial del Estado" (BOE).

Según el portavoz de la asociación, Paulino Baena, la AVT es el colectivo que mejor cumple los criterios que la orden ministerial establece para obtener las subvenciones, ya que es la que más víctimas del terrorismo tiene entre su miembros, es la de más antigüedad, y está implantada en todo el territorio nacional.

Estos requisitos, así como las bases generales para obtener las subvenciones y su distribución entre los distintos programas, son considerados como "muy acertados en líneas generales" por Paulino Baena, quien se congratuló de la decisión del Ministerio del Interior de establecer una subvención "específica" para las organizaciones que se dedican a ayudar a las personas que sufren de cerca el terrorismo.

Baena expicó que en las épocas de José Barrionuevo, José Luis Corcuera y Antonio Asunción como ministros del Interior, la AVT tenía una subvención de 500.000 pesetas mensuales, que se suprimió tras la entrada de Juan Alberto Belloch en el departamento, sin que la subvención se hubiese reestablecido hasta el día de hoy.

POTENCIACION

Se mostró convencido de que "desde una asociación mayoritaria" se atienden mejor las necesidades de las víctimas del terrorismo, por lo que esperan que, mediante esta orden ministrial, "se potencie" a la AVT.

A juicio del portavoz de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, la existencia de numerosas organizacines y fundaciones "dispersa" las ayudas. En este sentido, reiteró que le pareció "muy bien" el homenaje popular a Miguel Angel Blanco, pero insistió en que el resto de las víctimas de ETA "también tienen su corazoncito".

Tan sólo unos días antes del concierto por Miguel Angel, recordó, ETA había asesinado a un policía nacional, Daniel Villar, y en su entierro "no hbía ningún ministro". El homenaje a Blanco podría heber sido, en opinión de Paulino Baena, "un gran homenaje a todas las víctimas", ya que entre unas y otras hay, según la AVT, un gran "contraste".