En la sentencia, a la que tuvo acceso Servimedi, el tribunal considera probado que ambos formaron un "comando" de ETA, por lo que les condena por delitos de pertenencia a banda armada (8 años de prisión), depósito de armas (8 años), tenencia de explosivos (8 años) y un delito de terrorismo (15 años).

En los primeros días de 1996, Alonso Abad y Murga Zenarruzabeitia, que trabajaban en la redacción de "Egin", decidieron formar un "comando" que, siguiendo instrucciones enviadas desde Francia por la cúpula terrorista, participó en la extorsión a emprearios para pedir el "impuesto revolucionario".

Además, según la resolución, pusieron un artefacto explosivo en una empresa ubicada en la localidad alavesa de Salvatierra, que no acusó daños personales, pero sí notables destrozos materiales. Durante el juicio, Fernando Alonso declaró que "es un orgullo pertenecer a ETA".