La recomendación se basa en los datos de una encuesta británica que concluye que las ONG que no tienen en cuenta criterios éticos a la hora de realizar sus inversiones corren el riesgo de perder el apoyo público.

Según dicho estudio, la mayoría de los ciudadanos ingleses (el 83%) donarían con menos probabilidad o serían reacios a financiar a una ONG si descubriesen que ésta no invierte de manera ética.

La encuesta, encargada por la Fundación Charity Project de Eiris y en la que han participado 2.000 personas adultas del Reino Unido, demuestra que el 52% de la sociedad británica sería reacia a hacer donaciones a una ONG que estuviera invirtiendo en contra de sus objetivos.

Además, casi todas las personas interrogadas (el 91%) opinan que las ONG deberían invertir su dinero de manera ética o socialmente responsable.

Según la Asociation of Chartered Certified Accountants, sólo el 55% de las ONG británicas más importantes disponen de una política de inversión con criterios éticos. Por lo que respecta a España, la Fundación Economistas sin Fronteras señala que sólo una tercera parte de las ONG invierten bajo criterios éticos.

El estudio muestra que la sociedad desea saber lo que hacen las ONG con su dinero. "Hay un interés creciente de la población acerca del modo de financiación del tercer sector, y el doble riesgo de reputación y de ingresos al cual se enfrentan las ONG que no gestionan sus inversiones en coherencia con su misión", señalan desde Economistas sin Fronteras.

Debido a la actual crisis financiera, muchas ONG están preocupadas por la potencial caída de los ingresos procedentes de donaciones. "Por lo tanto", concluyen, "es crucial que las ONG mantengan la confianza de la sociedad y no pierdan donantes a causa de sus políticas de inversión".