UN ESTUDIO PUBLICADO POR EL IEF ADVIERTE QUE CEDER MÁS IMPUESTOS A LAS CCAA DESINCENTIVARÍA EL CRECIMIENTO DE LAS REGIONES - El Gobierno pretende elevar la capacidad recaudora de las comunidades autónomas a partir de 2008
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Un informe publicado por el Instituto de Estudios Fiscales (IEF), organismo dependiente del Ministerio de Economía y Hacienda, rechaza que el aumento de los ingresos directos por parte de las comunidades autónomas contribuya a un incremento de la renta per cápita de sus habitantes y advierte de que, de continuar esta senda, como pretende el Gobierno, se puede producir justo el efecto contrario: desincentivar el crecimiento económico.
El estudio, elaborado por los profesores Patricio Pérez y David Cantarero, de la Universidad de Cantabria, analiza diversas variables de la cesión de ingresos y el nivel de gastos de las autonomías, constatando la evolución de los mismos en los últimos 20 años.
Afirma que el grado de descentralización del sector público español "ya es superior al de países 'unitarios'", caso de Francia, Holanda, Irlanda, Italia, Luxemburgo y Reino Unido, y "comparable al de los países representativos del federalismo fiscal", entre los que cita Alemania, Austria, Australia, Canadá, Estados Unidos y Suiza.
Así, resalta que, en 1985, de cada 100 euros que las administraciones públicas gastaban en España, 76,6 provenían de la administración central; 12,6 de las comunidades autónomas, y 12,8 de los ayuntamientos.
Sin embargo, apenas 18 años después, en 2003, el Estado gastó 53,5 euros de cada 100; las autonomías pasaron a 33,4 euros, y los ayuntamientos permanecen casi estancados, en 13,1 euros.
No se ha descentralizado del mismo modo la captación de recursos, a falta de conocer los resultados del nuevo sistema de financiación, actualmente en proceso de negociación.
Con el sistema vigente, en 2002, la Administración Central recaudaba 73,3 de cada 100 euros; las comunidades autónomas 18,3 euros, y los ayuntamientos 8,4 euros, lo que provoca transferencias de renta del nivel central a los territoriales.
NO MÁS RIQUEZA Pero el que las autonomías dispongan de mayor capacidad de obtener recursos no es, según los autores, sinónimo de mayor nivel de riqueza entre sus habitantes.
Entre las conclusiones del informe, se destaca que, "aun aceptando que un sistema descentralizado pueda ser más sensible a las demandas de los ciudadanos, y aumentar el bienestar (la eficiencia del consumidor), resulta más discutible que crezca la eficiencia del productor".
El estudio, que persigue analizar si la descentralización fiscal está detrás de la mayor eficiencia de las regiones en los últimos años, concluye en negativo. "Nuestros resultados rechazan que la descentralización de ingresos contribuya al crecimiento del producto per cápita regional", sentencian los autores.
"Son otros factores", añaden, "como el capital físico, el capital humano, la presión fiscal, la tasa de inflación, la tasa de paro (...) los que en mayor medida explican el crecimiento de la renta per cápita".
"El grado de descentralización fiscal alcanzado en nuestro país es comparable ya al de los países representativos del federalismo y superior al de los países unitarios", agregan, y "dicho nivel es compatible con la maximización del crecimiento regional".
MÁS AVANCES, DESINCENTIVAN
"Por ende", concluyen los autores, "mayores avances en esa dirección podrían desinventivar" el crecimiento económico de las autonomías.
En la actualidad, las regiones de régimen común (todas menos País Vasco y Navarra) gestionan el 33% del IRPF; el 35% del IVA y el 40% de los impuestos especiales.
La propuesta del Gobierno para el nuevo modelo, que quiere tener en vigor en 2008, es que las autonomías controlen el 50% del IRPF y del IVA, y el 58% de los impuestos especiales.
(SERVIMEDIA)
17 Ago 2006
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