Los expertos, que comprueban por primera vez la base científica de la creencia popular, estudiaron la influencia del clima en el empeoramiento de los afectados por migraña, a través de los vientos canadienses Chinooks. Según el equipo del doctor Werner Becker, el cambio climático tiene una relación con el comienzo de las migrañas.

De los 75 pacientes estudiados, 32 teníanmás migrañas durante los días de los vientos Chinooks que en aquellos en los que no se daban esas condiciones climáticas. Esta relación era aún más directa en los pacientes de la tercera edad.

La importancia del estudio, según los expertos, reside en el hecho de que al conocer los factores por los que pueden comenzar las migrañas, se puede ayudar a los neurólogos a desarrollar tratamientos. Además, cuantas más causas se conozcan, más cerca se estará de acabar con las migrañas.