El joven pertenecía a una excursión compuesta por estudiantes del instituto de Rincón de la Victoria (Málaga), que habían acampado en Ardales.

Los hechos ocurrieron pasado el mediodía cuando, según ha relatado el alcalde de Ardales, Salvador Pendón, el fallecido abandonó el camping junto a otro compañero y se adentró en el paraje sin respetar los itinerarios establecidos para los excursionistas.

Los jóvenes llegaron a la peligrosa zona de El Almorchón, en donde resbalaon y cayeron por un precipicio. El golpe resultó mortal para José Antonio Olmo, que sufrió rotura de la base del cráneo y traumatismo torácico.

Sin embargo, su compañero, cuya identidad se desconoce hasta el momento, resultó totalmente ileso, aunque quedó bloqueado por el nerviosismo, lo que complicó la operación de rescate.

Un grupo de aspirantes a bomberos que se econtraba entrenando en un lugar próximo al de los hechos intervino inmediatamente animando con un megáfono al estudiante superviviene y avisando al helicóptero de la Jefatura Provincial de Tráfico.

Hasta el paraje de El Chorro llegaron dos helicópteros de tráfico y uno sanitario, cuyos pasajeros procedieron al rescate del superviviente y al intento de reanimación del recientemente fallecido tras un peligroso aterrizaje.

Se da la circunstancia de que en el paraje de El Chorro falleció también recientemente un niño que había ido de excursión con su colegio, que se precipitó al vacío al fallar un balcón colgante por el que caminba.

El paraje de El Chorro es conocido por su extrema belleza y su riqueza hidráulica, factores que se combinan con el de la gran peligrosidad que presenta para los excursionistas debido a la abundancia de precipicios y barrancos que en él existen.