En rueda de prensa, Marset declaró que "la perseverancia" que muestra Occidente, entre elos el FMI y el Banco Mundial, "para echar una mano a Yeltsin, para que no vengan los comunistas" es equivocada.

Para el eurodiputado, la causa última de esta situación es "un fundamentalismo más importante que el integrismo, que es el neoliberalismo".

Además, según Marset, "la fuerza con mayor racionalidad, responsabilidad y seriedad está siendo el partido comunista ruso". A su juicio, la postura tomada por este partido no supondrá un retroceso, sino "todo lo contrario".

Para Marset, la solción pasa por una "propuesta nacional que integre los recursos e intente hacer independiente rusa de esa influencia tan importante del FMI", ya que esta institución está obligando a meidas "draconianas" que son la causa de la situación que vive la población.