Durante su intervención en el debate sobre el estado de la Nación, Roca hizo un contínuo apoyo a la necesidad de que sea González quien lidere ese proceo de regeneración y, por tanto, que no dimita.

"Para algunos, ha llegado el momento de disolver las Cámaras y convocar nuevas elecciones. De hecho, ya algunos lo postulaban prácticamente al día siguiente de las últimas elecciones generales. No participamos de este criterio", añadió.

El político catalán emplazó a González a que convenza a la sociedad de que la lucha contra la corrupción será "dirigida y liderada" por el propio Gobierno y le emplazó también a que asuma las "consecuencias" del aciero o fracaso de esa empresa.

Según CiU, la resolución de la crisis económica viene determinada en gran medida por el clima de confianza que esas medidas de estabilidad consigan trasmitir a la ciudadanía y en los agentes económicos. "Aquí está su auténtico desafío".

En el terreno económico, Roca advirtió que en la legislatura 1989-93 se perdió el tiempo porque "se desaprovecharon los momentos de crecimiento económico para sanear y reformar, y se imponía hacerlo en tiempos de recesión, opción más trumática y difícil".

No obstante, matizó, sin ninguna euforia, sin ningún tipo de optimismo excesivo, hoy puede constatarse el inicio de una prudente recuperación económica".

CiU, dijo, "sigue entendiendo" que su apoyo al PSOE es necesario para "garantizar una acción de Gobierno que pudiera afrontar los cambios que requería la nueva estapa que se iniciaba (el 6 de junio del 93)".