La factoría, que emplea a unos 160 trabajadores, entre ellos el mismo alcalde, supone el sustento económico de la mayoría de las familias de La Riba.

El incendio comenzó a las 17.15 horas de ayer y provocó una alarma general en el pueblo, que tiene unos 1.000 habitantes, y que en su mayoría presenciaron, impotentes, cómo las llamas consumían su principal fuente de ingresos.

Por otra pate, la intensidad del humo que salía de las naves industriales afectó a las viviendas cercanas de la fábrica, situada en el centro de la población. La cuantía de las pérdidas, aunque cuantiosas, no habían sido evaluadas esta tarde.

En los trabajos de extinción participaron un centenar de bomberos procedentes de los parques de Tarragona, Lérida y Barcelona, con la ayuda de 30 vehículos autobomba.

Según fuentes de ese cuerpo, la tarea para controlar el fuego podría prolongarse aún 24 o 48 horas másdebido a las dificultades para acceder al interior de las naves.

Uno de los bomberos que trabajó ayer en la extinción tuvo que ser atendido por los servicios médicos, aquejado de conjuntivitis a causa de la gran cantidad de humo que producen los cientos de toneladas de papel almacenado.

A pesar de que en el curso de esta tarde las llamas ya se habían conseguido apagar en una de las naves, los servicios de extinción temían que se derrumbara el primer piso del almacén. En las dos plantas superioresde la industria se halla toda la maquinaria.

Aunque las causas concretas que originaron el fuego todavía no se conocen, todo hace pensar que se inició por una chispa de una prensa eléctrica en un subterráneo de cartón prensado.

Esta es la cuarta vez que se incendia la empresa Goma Camps desde que empezó a funcionar hace 30 años. La Riba tiene una tradición antigua en el sector de la papelería.