La Secretaría de Esado para Asuntos Exteriores de la República de San Marino, a través del Consulado General de España en Roma, expresó en 1990 su deseo de establecer con nuestro país un acuerdo para acabar con esta exigencia de pasaporte, y poder entrar en el territorio nacional de la otra parte provistos simplemente del carné de identidad.

Según el Ministerio de la Presidencia, el Gobierno español considera que el reducido tamaño de San Marino, su escasa población y el alto nivel económico de que disfrutan sus ciudadaos, así como su pertenencia, por razones históricas y geopolíticas, a nuestro entorno cultural, no hace previsible que facilitar la entrada en España de sus ciudadanos comporte riesgo alguno para nuestros intereses.

Asimismo, el Gobierno considera positivo este acuerdo porque los turistas españoles que viajan a Italia sin pasaporte ahora podrán también ir a San Marino con su DNI como único requisito.

La no exigencia de pasaporte prevista en el acuerdo es para estancias de hasta 90 días, siempre qe no comprendan el ejercicio de alguna actividad lucrativa. Para estancias superiores se necesitará pasaporte y cumplir con los requisitos exigidos por las leyes de inmigración respectivas.

El Acuerdo sobre Supresión de Visados incluye también una cláusula de orden público y seguridad, por la que cada una de las partes se reserva el derecho de denegar el acceso a aquellas personas cuya entrada se considere no deseable.