En virtud de este informe, el 94% de las españolas se siente más joven de lo que realmente es (entre 6 y 10 años más joven en casi la mitad de los casos).

El trabajo indica igualmente que la española considera que comienza a envejecer en torno a los 48-49 años y que para 6 de cada 10, la mujer que trabaja fuera de casa envejece mejor que el ama de casa.

De acuerdo con el mismo estudio, el 20% de las mujeres sufre depresión durante la menopausia, un problema que se agrava en el caso de las féminas que cuidan a sus padres enfermos.

Con respecto al trabajo, el informe indica que el perfil de la trabajadora española es el de una mujer menor de 30 años, con estudios elementales y empleada en el sector servicios.

En la misma línea, denuncia que en España, solo el 6% de las empresas aplican políticas de retención de trabajadores mayores de 50 años.

El 80% de las españolas cree que la sociedad impone a la mujer ciertas normas de conducta a medida que envejece (cómo vestirse, cómo maquillarse, cómo relacionarse, cómo divertirse...).

El 71% asegura que las desigualdades entre sexos son grandes, frente a tan sólo el 49% de los hombres que opina lo mismo. Sólo el 45% de las féminas cree, que avanzado el siglo XXI, las mujeres tendrán la misma presencia que los hombres en todos los ámbitos de la sociedad.