El certamen, que comienza mañana, domingo, de manera oficial, cuenta con una nutrida representación nacional, basada fundamentalmente en "lo flamenco", sin duda la mejor baza para promocionar las artes hispanas en el exterior.

Después de su exitosa aparición en los espectculos olímpicos, Cristina Hoyos y su ballet abrirán la representación española en la capital escocesa.

Asimismo, ha levantado gran interés la representación de "Yerma" de Federico García Lorca, sin duda el escritor español más popular en Gran Bretaña.

El teatro contemporáneo español también estará representado. Els Joglars con su última producción "Yo tengo un tío en América", una visión satírica del descubrimiento de América, mientras que el Traverse Theatre ha organizado en su nuevo espacio un imposio sobre el teatro catalán dentro de un congreso dedicado al teatro que se hace en la Europa de las lenguas minoritarias.

Más sorprendente resultará seguramente la representación de "Fuenteovejuna" de Lope de Vega por el Royal National Theatre, en gran parte por la presencia de actores de color en algunos de los papeles principales.

El drama del siglo de Oro está dirigido por Declan Donellan, uno de los directores más respetados por su capacidad de renovar a los clásicos sin alterar el espírtu del autor.

Asimismo, la versión de marionetas de "el Quijote" que el Bambalina Titelles de Albaida (Valencia) ha elegido para su presentación en Gran Bretaña.

En cuanto a las artes plásticas, destaca la presencia de 79 esculturas y una veintena de dibujos de Joan Miró, que también protagonizará las actividades de la Galería Nacional de Arte Moderno, que adquirió recientemente de "Maternité", de 1924, una de las obras surrealistas más carismáticas del pintor catalán.

EL OTRO FESTIVAL

Juno al prestigio y convencionalismo del festival oficial ("main"), se desarrolla el denominado Marginal ("fringe"). En realidad, se celebran seis festivales simultáneamente a lo largo de tres semanas:los dos mencionados y los de cine, jazz, televisión y libros.

Cualquier lugar es bueno para mostrar las dotes artísticas: la calle, los parques, aulas de colegios y de la universidad, cafés, pubs e incluso tienda de campañas.

El espectáculo lo invade todo. A lo largo de Princess Street, la calle princial de Edimburgo y el parque de mismo nombre, que separa el casco antiguo y la zona nueva de la ciudad, cientos de actores, cantantes, pintores tratan de darse a conocer al público, aunque casi siempre son los propios artistas que se conocen entre sí.

Para muchos, el festival marginal ha adquirido en los últimos años un atractivo, un volumen y una importancia artística que, si no eclipsa, enturbia la imagen del oficial.

El "fringe nació al tiempo que lo hacía el festival oficial hace 46 años, por niciativa del gobierno británico co la intención de curar las heridas entre los pueblos de Europa tras la II Guerra Mundial.

El año pasado,el frige reunió a más de 500 compañías teatrales de todos los tamaños procedentes de 25 países acudieron al festival de Edimburgo, donde se reresentaron un total de 1.058 obras utilizando variedad de espacios.

Casi dos millones de personas de todos los países visitan el festival anulamente. La mayoría de ellos no son artistas, pero acaban convirtiéndose en actres, músicos, pintores o malabaristas de la gran representación teatral de la cultura de los pueblos.